Por qué debemos mejorar la comodidad térmica en los edificios
30/06/2021
Su hogar debe ser el lugar más cómodo del mundo
Reuniones cálidas y somnolientas, aulas congestionadas, espacios de oficina helados, salas de espera frías o simplemente una habitación en casa que nunca parece sentirse “suficientemente cálida”. Todos comprendemos la importancia de la comodidad térmica.
Y todos comprendemos el impacto, especialmente después de un año en el que pasamos más tiempo en interiores que nunca antes. Nuestros cuerpos son increíblemente sensibles a los cambios de temperatura. La falta de comodidad térmica nos hace sentir estresados, molestos y distraídos si hace demasiado frío, y somnolientos, cansados e incapaces de concentrarnos si hace demasiado calor.
La comodidad térmica tiene implicaciones sociales generalizadas
Cuando nos sentimos incómodos, nuestro estado de ánimo empeora. Como resultado, la comodidad térmica tiene un impacto en nuestro bienestar, nuestra productividad y la capacidad de pensar con claridad. Y lo que es aún más importante, los interiores excesivamente fríos o calientes son poco saludables, especialmente para los adultos mayores y las personas enfermas o vulnerables durante las olas de calor intensas o los inviernos duros.
¿Pueden los edificios con más comodidad térmica reducir las internaciones hospitalarias, los días de enfermedad y el ausentismo? ¿Mejorar el desempeño académico? ¿Prevenir accidentes o mejorar la productividad de las compañías?
Ya conocemos las respuestas. Trabajamos mejor, estudiamos mejor, nos desempeñamos mejor y nos sentimos más saludables cuando nos sentimos cómodos.
Comprensión de la comodidad térmica
En pocas palabras, la comodidad térmica hace referencia a ese estado en el que una persona no tiene demasiado calor ni demasiado frío. Por supuesto, tener calor o frío es muy subjetivo. Es imposible complacer a todas las personas todo el tiempo con respecto a la comodidad térmica. Es por eso que se desarrolló un “promedio de confort” reconocido internacionalmente, conocido como “PMV” (voto medio estimado).
La comodidad térmica supone más que la temperatura. Se ve afectada por seis factores clave:- Nuestra tasa metabólica (si estamos muy activos o simplemente sentados en un solo lugar durante todo el día)
- La ropa que usamos
- Temperatura ambiente (el aire)
- Velocidad a la que se mueve el aire
- La humedad del aire
- Temperatura radiante
La temperatura radiante (la temperatura de superficies como paredes o ventanas, así como las fuentes de calor, como el sol o un radiador) tiene un impacto significativo en el confort. Por ejemplo, podemos sentir el calor de un radiador en un lado del cuerpo, mientras que el otro lado puede sentirse frío si está orientado hacia una ventana fría. Es por eso que los radiadores se instalan cerca de las ventanas para mejorar la temperatura radiante. Si usted apaga este radiador, rápidamente se sentirá incómodo si está cerca de esta ventana fría, incluso si la temperatura del aire sigue siendo la misma.
Cómo el aislamiento mejora la comodidad térmica
La mejor solución a largo plazo para garantizar la comodidad térmica general es el aislamiento. El aislamiento mejora tanto la temperatura ambiente como la temperatura radiante de las superficies, como paredes externas, pisos y techos.
El aislamiento obstruye la trayectoria del calor. En invierno, una vivienda aislada disfruta de una buena comodidad térmica debido a una mejor retención del calor y una mejor temperatura de la superficie de las paredes y los techos. En verano, el aislamiento actúa como una barrera contra el calor externo, lo que mantiene los interiores más frescos.
El aislamiento adecuado en paredes, techos y pisos incide directamente en la velocidad del cambio de temperatura ambiente dentro del cerramiento de una construcción. Sin aislamiento, uno tiende a aumentar la calefacción o el aire acondicionado para compensar los cambios de temperatura, lo que derrocha recursos, aumenta las facturas de energía y tiene un impacto ambiental negativo.
Un buen sellado hermético es fundamental
Para maximizar el rendimiento del aislamiento, es vital tener también un buen sellado hermético, lo que significa “tapar los huecos” en el edificio (como las uniones del ático no aisladas o los espacios alrededor de las ventanas), donde el aire acondicionado puede filtrarse hacia afuera.
Es igualmente importante usar soluciones que permitan que el edificio permanezca hermético, pero también que pueda eliminarse el exceso de humedad, por ejemplo, en los baños. Un extractor de baño con ventilación adecuada ayudará a evitar cualquier riesgo de condensación.
La comodidad térmica desempeña un papel importante en la forma en la que disfrutamos de los lugares donde vivimos y trabajamos. Si están cómodos, los ocupantes de un edificio son felices, saludables y productivos. El aislamiento de fibra de vidrio, combinado con el sellado hermético, puede contribuir a hacer que sus espacios de vivienda y trabajo sean más cómodos y tengan eficiencia energética durante todo el año.